Manifiesto Libertad para Carmelo (Ante el destrozo al Huerto por parte del Ayuntamiento)

MANIFIESTO

¡LIBERTAD PARA CARMELO YA!

En la mañana del 16 de Mayo, mientras la prima de riesgo española superaba por primera vez la barrera de los 500 puntos, el Distrito de Fuencarral montaba un espectacular y costoso dispositivo para desmantelar los huertos vecinales de Montecarmelo y Fuencarral.

El primero en caer fue el huerto de Montecarmelo. Un huerto levantado con ilusión y esfuerzo por los vecinos más alegres y entusiastas del barrio en un solar de propiedad pública, abandonado a su deterioro, y en cuyos terrenos debería erguirse nuestro Centro de Salud.

A las 8.30 de la mañana, escoltados por tres patrullas de la policía municipal y apoyados por un camión y una grúa móvil de considerables dimensiones, más de media docena de operarios del SELUR procedían a cumplir la orden de desmantelamiento emitida por el Concejal Presidente del Distrito de Fuencarral-El Pardo, Don Jose Antonio González de la Rosa, ante la mirada atónita de Don Carmelo, vecino del barrio, a quien el desproporcionado dispositivo municipal sorprendió trabajando en el huerto, como en él es costumbre.

Según testigos presenciales, Carmelo mostró  en todo momento una actitud pacífica, seria y responsable, aunque se negó, eso sí, a abandonar los bancales, a pesar de las sucesivas petitorias de los agentes en este sentido.  Conminado a identificarse, Carmelo guardó silencio, aunque nos consta que en ningún momento faltó el respeto a los representantes del orden, ni mostró la más mínima resistencia al desarrollo de las operaciones. Sabemos que Carmelo permaneció inmóvil, observando con consternación cómo los operarios del Ayuntamiento se afanaban en destruir con meticulosa saña nuestra siembra, arrancando una a una las subversivas lechugas, los radicales ajetes, los alborotadores guisantes, los desestabilizadores tomates y demás extremistas verduras que tanto amenazaban la paz y el orden en nuestro barrio.

A pesar de su actitud pacífica y serena, Carmelo fue detenido y conducido a dependencias policiales, donde sigue retenido a día de hoy sin que sepamos aún a ciencia cierta de qué cargos se le acusa.

Carmelo no es solo un amigo entrañable, un vecino generoso y un hortelano ejemplar, dedicado al huerto en cuerpo y alma, día y noche. Es también el primer espantapájaros detenido por la policía de nuestro país desde el advenimiento de la democracia.

Foto: Carmelo y sus desestabilizadores cómplices trayendo el caos y el desorden al barrio

Una vez arrasado el huerto de Montecarmelo, el operativo municipal procedió a aniquilar el huerto de Fuencarral, sin que en este caso se produjera detención alguna.

55 tomates, 40 ajetes, 52 judías, 33 lechugas, 20 calabacines, 15 plantas aromáticas y un número aún sin cuantificar de guisantes han dado su vida por los huertos vecinales del distrito de Fuencarral. Don Carmelo ha perdido su libertad y nosotros los aperos, el depósito de agua, la compostera y nuestra querida y trabajada siembra. Nuestro crimen: demandar los servicios de salud que merecemos y, sobre todo, ensayar otra forma más sana, más alegre y más democrática de hacer barrio.

Por eso, porque somos ciudadanos libres, porque estamos hartos de chorizos pero queremos más verduras y porque echamos de menos a Carmelo, sus compañeros hortelanos exigimos ¡LIBERTAD PARA CARMELO YA!

Fdo.: Los vecinos y vecinas de los huertos de Fuencarral y Montecarmelo.